El espacio Málaga Solidaria de La Opinión de Málaga, que compartimos con Cruz Roja Málaga, Málaga Acoge, Arrabal e Incide, recogió el pasado viernes (20 de noviembre del 2020) el artículo de opinión de Yolanda Florido Maldonado, coordinadora de Acción Social de Prodiversa-Progreso y Diversidad. Puede consultar el artículo original aquí.
Esta frase refleja la incertidumbre que en muchas ocasiones viven las personas con las que trabajamos en Prodiversa. Porque para conseguir resultados sólidos no podemos plantear nuestro trabajo a corto plazo y, en demasiadas ocasiones, nos vemos obligadas a ello por la demora o interrupción de las convocatorias de programas por parte de algunas administraciones.
Y es que, desde finales de 2019, venimos trabajando la inserción laboral a través del Programa ENTRA; incluido en la Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión e Inclusión Social, Intervención en Zonas desfavorecidas, conocida como ERACIS, financiada a través de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, en cofinanciación con el Fondo Social Europeo.
Nuestra labor, no es nueva: Orientar y apoyar a las personas con más dificultades para la inclusión laboral, estableciendo una serie de estrategias a través de los Itinerarios de Inserción. Y os preguntareis que qué es eso de un itinerario. Sin palabras técnicas, consiste en acompañar a las personas en su camino hacia la consecución de un puesto de trabajo, bien sea por cuenta ajena o por cuenta propia.
Pongamos como ejemplo un trayecto y una mochila, donde incluimos aquellas cosas que vamos necesitar: información, habilidades, competencias, recursos, formación… Que nos facilitarán el trayecto y la llegada a la meta: el empleo y/o el emprendimiento y su posterior consolidación. Y en ese camino, todo un equipo de profesionales trabajando con las personas desde múltiples perspectivas: social, psicológica, laboral y jurídica entre otras, en alianza con otras entidades y Servicios Sociales, en nuestro caso de los distritos Centro y Palma Palmilla.
Todo ello unido a un factor determinante, la motivación y el empuje que una persona debe tener para continuar su búsqueda, lo que trabajamos a través de distintas fórmulas tanto grupales como individuales. Esta motivación se complementa con salidas de ocio y tiempo libre, en un interesante taller en el que resaltamos las experiencias de las personas. Acciones que tienen como objetivo el acceso de las personas a nuevos entornos que no han podido experimentar ni conocer: salidas a teatros, museos, ferias de empleo, entornos turísticos y deportivos, entornos que posibilitan compartir, reflexionar y aprender, así como fortalecer las redes de apoyo mutuo.
Así, en lo que llevamos de año, y siempre con las medidas sanitarias pertinentes, hemos podido hacer dos salidas: una ruta guiada por El Caminito del Rey y la visita a las instalaciones de la Fundación Laboral de la Construcción, donde han podido escuchar de primera mano, los requisitos para acceder a un empleo en este sector, los puestos más demandados o competencias y formación que el mercado laboral demanda.
Hasta ahora todo bien y sin embargo vemos que las fechas se acercan, finaliza 2020 y no sabemos si podremos seguir trabajando y dar respuesta a estas personas. La Estrategia de Zona Desfavorecida está aprobada pero aún no tenemos noticias de cara a los dos años siguientes. Y nos preguntamos: ¿Qué va a suceder con las personas de zonas desfavorecidas que estamos acompañando? Porque nos dolería escuchar de nuevo el “¿y ahora dónde voy?”.