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Más de 1.500 menores tutelados han sido atendidos por los equipos de trabajo de Prodiversa en sus centros de protección desde el año 2002.

Anualmente más de un centenar de niños y niñas tuteladas pasan por los centros de protección gestionados por Prodiversa, que son atendidos por más de una treintena de profesionales.

La ONGD Prodiversa ha resultado nuevamente adjudicataria de 3 centros de protección de menores por parte de la Junta de Andalucía en Málaga para un total de 40 menores tutelados durante los próximos dos años.

centros de protección de menores

Desde el año 2002, la ONGD malagueña Prodiversa viene desarrollando esta labor en cuanto a la dirección de centros de protección para menores tutelados. Actualmente, Prodiversa gestiona tanto centros del programa de primera acogida como centros residenciales. Así, cuentan con:

  • “Grazalema”: un centro del programa de primera acogida con capacidad para 16 menores.
  • “Prodiversa”: un centro residencial básico para 16 menores.
  • “Macondo”: otro centro residencial con 8 plazas disponibles para menores hasta los 18 años.

Cada uno de los centros de protección cuenta con equipos de trabajo multidisciplinares compuestos por educadoras sociales, psicólogas y trabajadoras sociales que acompañan en todo momento el paso de los niños y niñas en su estancia en los centros, proporcionado las atenciones en materia educativa, psicológica y social que requieran, siempre en permanente contacto con el Servicio de Protección de Menores de la Junta de Andalucía en Málaga y con la Fiscalía de Menores. Son más de una treintena de personas, además, en cada centro cuenta con personal de servicio de mantenimiento y limpieza.

En palabras de Juan Carlos Espejo, presidente de Prodiversa: “Nuestro objetivo es que cada uno de los centros sea una familia y tratar de normalizar la vida de estos niños y niñas, muchos de ellos con muy corta edad, hasta su salida del sistema de protección”.

Los centros de protección de Prodiversa colaboran de manera activa con instituciones como el Colegio Profesional de la Abogacía o el Colegio Profesional de Trabajo Social. Además, desarrollamos prácticas para alumnado de la Universidad de Málaga, principalmente en materia de Educación y Trabajo Social y con estudiantes de Ciclos Superiores de IES malagueños que abordan la Integración Social.

Cada centro prevé anualmente un completo calendario de actividades donde se refuerza la labor educativa que reciben en sus centros escolares, trabajando además materias como la igualdad, la salud sexual y reproductiva, la sostenibilidad ambiental o el fomento del pensamiento crítico. Desde los centros de Prodiversa, se trabaja con los y las menores su preparación para ser personas autónomas al cumplir la mayoría de edad, con la realización de tareas y el asumir cada vez más responsabilidades antes de salir del sistema legal de tutela.

Además, Prodiversa y sus empresas de inserción sociolaboral, Acompanya y Adobe Verde, implementan acciones para la plena inclusión de estos chicos y chicas para dotar de conocimientos, nuevas habilidades como su participación en proyectos de movilidad en el marco del programa Erasmus + de la Unión Europea o prácticas profesionales en ámbitos como las tareas administrativas, el sector de la restauración o la construcción.

centros de protección de menores

El presidente de la asociación explica que son muchas las entidades del tercer sector en Málaga que colaboran y cooperan para proporcionar oportunidades y proporcionar una vida mejor para estos niños y niñas tuteladas, desde la impartición de talleres educativos a invitaciones a actividades deportivas y de ocio. Los chicos y chicas de Prodiversa participan plenamente de la vida social y cultural de nuestra ciudad y tratamos de aportarles la importancia de una ciudadanía activa y comprometida con las causas sociales.

Es un orgullo para todas las personas que componen nuestra entidad social encontrarnos con quienes un día convivieron en nuestra familia de los centros y, pasados los años, han formado su propia familia, han encontrado un empleo y teniendo una vida plena y normalizada”, afirma Espejo.