Paquita Sauquillo, presidenta del Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad (MPDL) tiene claro que la solución, los cambios sociales, deben provenir de un activismo social e ideológico, de la pelea y la ilusión de que el mundo sea mejor, de la unión, la cooperación y el trabajo conjunto por unos ideales. Sauquillo estuvo el pasado 13 de septiembre en el ciclo de conversaciones organizado por el 25 Aniversario de Prodiversa y, junto con el presidente de la entidad, Juan Carlos Espejo, condujo un recorrido por los últimos 25 años de trabajo por la Paz.
La contextualización del momento actual, según la presidenta de MPDL, proviene de los movimientos pacifistas contra los euromisiles, el mundo bipolar de los grandes bloques, la caída del Muro de Berlín o la Guerra de los Balcanes, que marcaron el trabajo de MPDL durante sus primeros años de vida. Una labor que, como Saquillo reconoce, «pensábamos que con el mundo globalizado había cosas que se iban a solucionar», algo que finalmente no ocurrió. Como señalaban Russell y Einstein «la sociedad puede cambiar pero el pensamiento humano no cambia fácilmente» recuerda la presidenta de MPDL.
Así, para Sauquillo, el atentado de las Torres Gemelas, la Guerra de Irak y las desigualdades crecientes han creado un escenario lleno de retos para las organizaciones sociales y administraciones que trabajan por la Paz. Los países emergentes y sus problemas, el mundo árabe, la violencia y las migraciones, dentro de lo cual resalta la lucha contra el ocio, el racismo y la xenofobia, son espacios en los que hay que trabajar con intensidad para garantizar un mundo con mayor seguridad, paz y desarrollo.