Según la UNESO, la alfabetización mediática es el conjunto de habilidades, conocimientos y comprensión necesarios para que las personas interactúen con la información y los medios de comunicación.
Dicho de otra manera: es un proceso de aprendizaje de habilidades y herramientas que nos permiten adoptar una actitud crítica hacia el contenido que consumimos. La alfabetización implica definir, localizar, evaluar, organizar, juzgar y procesar la información que recibimos y/o emitimos. Esta es la consecuencia de la llamada infoxicación: la necesidad de contrastar constantemente el contenido con otras fuentes, y de plantear cuestiones como quién envía el mensaje, por qué lo envía y a través de qué medio.
Pensamos que quienes necesitan recibir formaciones en alfabetización mediática son las personas adultas (mayores de 40) que, al no pertenecer a la generación de nativos/as digitales, desconocen el funcionamiento de las nuevas tecnologías.
Pero, ¿y si te dijera que la juventud es víctima -en igual medida que anteriores generaciones- de bulos? Precisamente, por haber nacido en esta era digital, su mirada es mucho más vulnerable: la mayoría cree firmemente todo aquello que ve en internet y no contrasta la información que recibe. Por ello, desde Prodiversa, nos preocupamos por dotar a los/as más jóvenes de herramientas para identificar la manipulación y los casos de fake news que puedan encontrarse en los medios sociales.
“Jóvenes Generando Valores: Diversidad sexual y nuevas masculinidades a través de lenguajes audiovisuales y redes sociales”, financiado por la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional al Desarrollo (AACID) y en colaboración con EntreFronteras, Sui Géneris: Psicología, Género y Sexualidad y AHIGE. Asociación de Hombres por la Igualdad de Género.